El martes tuvo lugar la
primera sesión de la novena legislatura de la Asamblea. Titulares generalizados de la sesión:”Blanca Martín ya es la
segunda mujer que preside la Asamblea”. Los medios hacen referencia a la primera mujer que la presidió: la
izquierdista María Teresa Rejas. Justo el día previsto para investir
presidente a Fernández Vara, el 4 de julio, hará 20 años que Rejas
ocupó dicho puesto. Meses atrás, 24 de mayo de 1995, se habían
celebrados elecciones autonómicas en las que el PSOE perdió la mayoría
absoluta obtenida en 1991(pasó de 39 diputados a 31), el PP
obtuvo 27 (8 más que en las anteriores), IU 6 (dos más) y Extremadura
Unida un diputado (por ninguno en las anteriores). PP e IU pactaron la
composición de la Mesa, y Rejas fue elegida presidenta. Hasta ahí todo normal, legítimo, y
destacable que Rejas fuera la primera mujer que presidiera el templo de
la democracia de Extremadura. Al año siguiente de ocupar Rejas su
cargo, le fue concedida la Medalla de Extremadura a Antonio Vázquez
López por ser el primer presidente de la Asamblea. Y en
1997, sendas medallas les fueron concedidas a Luís Jacinto Ramallo
García y Manuel Bermejo Hernández por ser los primeros presidentes de la
Junta Regional Preautonómica de 1978/1980 y 1980/1982.
Las concesiones vinieron de la mano del presidente Juan Carlos Rodríguez
Ibarra, y fueron otorgadas y recogidas siendo Rejas presidenta de la
Asamblea. Llama la atención que para la primera
mujer que presidió la Asamblea no se tuviera el mismo gesto en aquellos
años que para los referidos. ¿No es la condición de mujer
lo que se destaca ahora de Martín? ¿Acaso que la presidencia de Rejas
fuera poco más de dos años la inhabilitaba para tal concesión? ¡Cuánto agravio innecesario se produjo que sirvió de excusa para el cainismo sobre la investidura de 2011! Teresa Rejas estará muy
feliz con el premio “Juanita Elguezábal” que le concedió en 2011 el Área
de Igualdad del Instituto Municipal de Asuntos Sociales del
Ayuntamiento de Cáceres en su segunda edición. Pero no les parece a sus
señorías que a la primera mujer que presidió la Asamblea… No hablan del
valor del diálogo, de tiempo de acuerdos. Pues eso, un gesto.
viernes, 26 de junio de 2015
miércoles, 24 de junio de 2015
Teresa Rejas, primera mujer que presidió la Asamblea
El autor plantea que podría merecer la Medalla de Extremadura por eso.
En el día de anteayer tuvo lugar la primera sesión de la novena legislatura de la Asamblea de Extremadura, y se desarrolló según el orden previsto: Mesa de Edad de la sesión constitutiva, juramento o promesa de acatar la Constitución y el Estatuto de Autonomía por parte de los 65 diputados elegidos el pasado 24 de mayo y votaciones para elegir los miembros de la Mesa de la Asamblea.
En el día de anteayer tuvo lugar la primera sesión de la novena legislatura de la Asamblea de Extremadura, y se desarrolló según el orden previsto: Mesa de Edad de la sesión constitutiva, juramento o promesa de acatar la Constitución y el Estatuto de Autonomía por parte de los 65 diputados elegidos el pasado 24 de mayo y votaciones para elegir los miembros de la Mesa de la Asamblea.
Titulares generalizados de la citada sesión:”Blanca Martín ya es la
segunda mujer que preside la Asamblea”. A continuación, los distintos
medios hacen referencia a la primera mujer que la presidió: la
izquierdista María Teresa Rejas.
Justo el día previsto para investir presidente a
Fernández Vara, próximo 4 de julio, hará 20 años que Rejas ocupó dicho
puesto. Meses atrás, 24 de mayo de 1995, se habían celebrados elecciones
autonómicas en las que el PSOE perdió la mayoría absoluta obtenida en
las de 1991(pasó de 39 diputados a 31), el PP obtuvo 27 (8 más que en
las anteriores), IU seis (dos más) y Extremadura Unida un diputado (por
ninguno en las anteriores). PP e IU pactaron la composición de la Mesa, y
Rejas fue elegida presidenta.
Hasta ahí todo normal,
legítimo, y destacable que Rejas fuera la primera mujer que presidiera
el tempo de la democracia de Extremadura.
Al año
siguiente de ocupar Rejas su cargo, le fue concedida la Medalla de
Extremadura a Antonio Vázquez López por ser el primer presidente de la
Asamblea de Extremadura. Y en 1997, sendas medallas les fueron
concedidas a Luís Jacinto Ramallo García y Manuel Bermejo Hernández por
ser los primeros presidentes de la Junta Regional Preautonómica de
1978/1980 y 1980/1982 respectivamente. Las concesiones vinieron de la
mano del presidente Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y fueron otorgadas y
recogidas siendo Rejas presidenta de la Asamblea.
Llama la atención que para la primera mujer que presidió la Asamblea no
se tuviera el mismo gesto en aquellos años que para los referidos
anteriormente. ¿No es la condición de mujer lo que se destaca ahora de
Martín? ¿Acaso que la presidencia de Rejas fuera poco más de dos años la
inhabilitaba para tal concesión?
¡Cuánto agravio innecesario se produjo que sirvió de excusa para el cainismo sobre la investidura de 2011!
Teresa Rejas seguramente estará muy feliz con el premio “Juanita
Elguezábal” que le concedió en 2011 el Área de Igualdad del Instituto
Municipal de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Cáceres en su segunda
edición. Pero no les parece a sus señorías que a la primera mujer que
presidió la Asamblea… No hablan del valor del diálogo, de tiempo de
acuerdos. Pues eso, un gesto.
Nota singular.
El 9 de octubre de 1995 recibió en calidad de Presidenta a una
delegación de la que yo era portavoz, la Plataforma por la Sanidad
Pública de Mérida, y desde entonces no la he vuelto a ver.
Sobre María Teresa Rejas, primera mujer que presidió la Asamblea
Nosolomérida
Teresa Rejas seguramente estará muy
feliz con el premio “Juanita Elguezábal” que le concedió en 2011 el Área
de Igualdad del Instituto Municipal de Asuntos Sociales del
Ayuntamiento de Cáceres en su segunda edición. Pero no les parece a sus
señorías que a la primera mujer que presidió la Asamblea… No hablan del
valor del diálogo, de tiempo de acuerdos. Pues eso, un gesto.
Nota singular. El 9 de octubre de 1995 recibió en calidad de Presidenta a una delegación de la que yo era portavoz, la Plataforma por la Sanidad Pública de Mérida, y desde entonces no la he vuelto a ver.
Teresa Rejas |
En el día de ayer tuvo lugar la primera
sesión de la novena legislatura de la Asamblea de Extremadura, y se
desarrolló según el orden previsto: Mesa de Edad de la sesión
constitutiva, juramento o promesa de acatar la Constitución y el
Estatuto de Autonomía por parte de los 65 diputados elegidos el pasado
24 de mayo y votaciones para elegir los miembros de la Mesa de la
Asamblea.
Titulares generalizados de la citada
sesión:”Blanca Martín ya es la segunda mujer que preside la Asamblea”. A
continuación, los distintos medios hacen referencia a la primera mujer
que la presidió: la izquierdista María Teresa Rejas.
Justo el día previsto para investir
presidente a
Fernández Vara, próximo 4 de julio, hará 20 años que Rejas ocupó dicho
puesto. Meses atrás, 24 de mayo de 1995, se habían celebrados elecciones
autonómicas en las que el PSOE perdió la mayoría absoluta obtenida en
las de 1991(pasó de 39 diputados a 31), el PP obtuvo 27 (8 más que en
las anteriores), IU seis (dos más) y Extremadura Unida un diputado (por
ninguno en las anteriores). PP e IU pactaron la composición de la Mesa, y
Rejas fue elegida presidenta.
Hasta ahí todo normal, legítimo, y
destacable que Rejas fuera la primera mujer que presidiera el tempo de
la democracia de Extremadura.
Al año siguiente de ocupar Rejas su
cargo, le fue concedida la Medalla de Extremadura a Antonio Vázquez
López por ser el primer presidente de la Asamblea de Extremadura. Y en
1997, sendas medallas les fueron concedidas a Luís Jacinto Ramallo
García y Manuel Bermejo Hernández por ser los primeros presidentes de la
Junta Regional Preautonómica de 1978/1980 y 1980/1982 respectivamente.
Las concesiones vinieron de la mano del presidente Juan Carlos Rodríguez
Ibarra, y fueron otorgadas y recogidas siendo Rejas presidenta de la
Asamblea.
Llama la atención que para la primera
mujer que presidió la Asamblea no se tuviera el mismo gesto en aquellos
años que para los referidos anteriormente. ¿No es la condición de mujer
lo que se destaca ahora de Martín? ¿Acaso que la presidencia de Rejas
fuera poco más de dos años la inhabilitaba para tal concesión?
¡Cuánto agravio innecesario se produjo que sirvió de excusa para el cainismo sobre la investidura de 2011!
Nota singular. El 9 de octubre de 1995 recibió en calidad de Presidenta a una delegación de la que yo era portavoz, la Plataforma por la Sanidad Pública de Mérida, y desde entonces no la he vuelto a ver.
Sobre María Teresa Rejas, primera mujer que presidió la Asamblea
Extremadura Progresista
Teresa Rejas |
En el día de ayer tuvo lugar la
primera sesión de la novena legislatura de la Asamblea de Extremadura, y
se desarrolló según el orden previsto: Mesa de Edad de la sesión
constitutiva, juramento o promesa de acatar la Constitución y el
Estatuto de Autonomía por parte de los 65 diputados elegidos el pasado
24 de mayo y votaciones para elegir los miembros de la Mesa de la
Asamblea.
Titulares generalizados de la citada sesión:”Blanca Martín ya es la
segunda mujer que preside la Asamblea”. A continuación, los distintos
medios hacen referencia a la primera mujer que la presidió: la
izquierdista María Teresa Rejas.
Justo el día previsto para investir presidente a Fernández Vara, próximo 4 de julio, hará 20 años que Rejas ocupó dicho puesto. Meses atrás, 24 de mayo de 1995, se habían celebrados elecciones autonómicas en las que el PSOE perdió la mayoría absoluta obtenida en las de 1991(pasó de 39 diputados a 31), el PP obtuvo 27 (8 más que en las anteriores), IU seis (dos más) y Extremadura Unida un diputado (por ninguno en las anteriores). PP e IU pactaron la composición de la Mesa, y Rejas fue elegida presidenta.
Justo el día previsto para investir presidente a Fernández Vara, próximo 4 de julio, hará 20 años que Rejas ocupó dicho puesto. Meses atrás, 24 de mayo de 1995, se habían celebrados elecciones autonómicas en las que el PSOE perdió la mayoría absoluta obtenida en las de 1991(pasó de 39 diputados a 31), el PP obtuvo 27 (8 más que en las anteriores), IU seis (dos más) y Extremadura Unida un diputado (por ninguno en las anteriores). PP e IU pactaron la composición de la Mesa, y Rejas fue elegida presidenta.
Hasta ahí todo normal, legítimo, y
destacable que Rejas fuera la primera mujer que presidiera el tempo de
la democracia de Extremadura.
Al año siguiente de ocupar Rejas su
cargo, le fue concedida la Medalla de Extremadura a Antonio Vázquez
López por ser el primer presidente de la Asamblea de Extremadura. Y en
1997, sendas medallas les fueron concedidas a Luís Jacinto Ramallo
García y Manuel Bermejo Hernández por ser los primeros presidentes de la
Junta Regional Preautonómica de 1978/1980 y 1980/1982 respectivamente.
Las concesiones vinieron de la mano del presidente Juan Carlos Rodríguez
Ibarra, y fueron otorgadas y recogidas siendo Rejas presidenta de la
Asamblea.
Llama la atención que para la primera
mujer que presidió la Asamblea no se tuviera el mismo gesto en aquellos
años que para los referidos anteriormente. ¿No es la condición de mujer
lo que se destaca ahora de Martín? ¿Acaso que la presidencia de Rejas
fuera poco más de dos años la inhabilitaba para tal concesión?
¡Cuánto agravio innecesario se produjo que sirvió de excusa para el cainismo sobre la investidura de 2011!
Teresa Rejas seguramente estará muy
feliz con el premio “Juanita Elguezábal” que le concedió en 2011 el Área
de Igualdad del Instituto Municipal de Asuntos Sociales del
Ayuntamiento de Cáceres en su segunda edición. Pero no les parece a sus
señorías que a la primera mujer que presidió la Asamblea… No hablan del
valor del diálogo, de tiempo de acuerdos. Pues eso, un gesto.
Nota singular. El 9 de octubre de 1995
recibió en calidad de Presidenta a una delegación de la que yo era
portavoz, la Plataforma por la Sanidad Pública de Mérida, y desde
entonces no la he vuelto a ver.
sábado, 6 de junio de 2015
La estabilidad
Extremadura Progresista
Montiel(Podemos), Puig (PSOE) y Oltra (Compromís) |
Radicales, extrema izquierda,
incertidumbre, inestabilidad, son los términos que emplea el presidente
Mariano Rajoy y terminales mediáticas para infundir miedo al empobrecido
pueblo español. Se trata de evitar a toda costa que haya
acuerdos/pactos en los que el partido popular no esté. Ya vemos que no
eran ocurrencias de Esperanza Aguirre sino todo un plan para evitar los
gobiernos de cambio que las urnas del 24M exigen. Su nuevo mantra es que
ellos son los que garantizan la estabilidad, bien solos o acompañados
de socialistas moderados. A la mano la Arcadia feliz pero sin los
radicales de Podemos, es su mensaje.
Rajoy asocia inestabilidad con gobiernos de coalición sabiendo que la
prosperidad y estabilidad que disfrutan países de nuestro entorno está
hecha a base de acuerdos y pactos de gobierno. Si repasamos la historia
electoral de los últimos 70 años de Suecia, Dinamarca, Finlandia,
Noruega e Islandia constataremos: que los gobiernos que se fueron
conformando fueron mayoritariamente de coalición, que las mayorías
absolutas alcanzadas en esos años fueron: una Suecia, y hace casi 50
años, ninguna en Dinamarca e Islandia y cuatro en Noruega, y la última
hace más de 60 años; que las coaliciones sigue en la actualidad (por
ejemplo en Suecia gobiernan los socialdemócratas en coalición con los
verdes y en Dinamarca los socialdemócratas en coalición con el partido
popular socialista y el partido izquierda radical, etc.); que en
Islandia seguramente cuentan en el haber de estabilidad que su
Parlamento iniciara acciones legales a finales de enero de 2009 contra
el que fue su primer ministro, Geir Hilmar Haarde, por llevar a su país a
la quiebra.
¿Cuánto tiempo lleva el Centro de Investigaciones Sociológicas certificando la inestabilidad creada por los sinvergüenzas y ladrones del erario público? ¿Cuándo veremos iniciativas semejantes a las de Islandia en los plenos de municipios, cabildos y asambleas autonómicas? ¿Cuándo en nuestro haber democrático estará la partida: autores de despilfarros y quiebras?
No se trata de frentes, ni ajustes de cuentas. Se trata de la estabilidad que nace del ejercicio de la democracia, la gran olvidada. Ellos hablan de ella como si de verdad les importara, cuando tenemos sobradas muestras de que se refieren a su estabilidad (por ejemplo, nos acordamos de José Antonio Monago pidiendo respeto para Podemos en julio 2014, y ahora negando la abstención a Fernández Vara para obligarle a pactar con Podemos). Tenemos que tejer alianzas con quienes verdaderamente vendrán con nosotros a buscar la estabilidad. En Badajoz, Cáceres, Valencia, Badalona, Madrid, Barcelona, Navarra, Castilla la Mancha, Extremadura…
¿Cuánto tiempo lleva el Centro de Investigaciones Sociológicas certificando la inestabilidad creada por los sinvergüenzas y ladrones del erario público? ¿Cuándo veremos iniciativas semejantes a las de Islandia en los plenos de municipios, cabildos y asambleas autonómicas? ¿Cuándo en nuestro haber democrático estará la partida: autores de despilfarros y quiebras?
No se trata de frentes, ni ajustes de cuentas. Se trata de la estabilidad que nace del ejercicio de la democracia, la gran olvidada. Ellos hablan de ella como si de verdad les importara, cuando tenemos sobradas muestras de que se refieren a su estabilidad (por ejemplo, nos acordamos de José Antonio Monago pidiendo respeto para Podemos en julio 2014, y ahora negando la abstención a Fernández Vara para obligarle a pactar con Podemos). Tenemos que tejer alianzas con quienes verdaderamente vendrán con nosotros a buscar la estabilidad. En Badajoz, Cáceres, Valencia, Badalona, Madrid, Barcelona, Navarra, Castilla la Mancha, Extremadura…
La estabilidad
Nosolomérida
Radicales,
extrema izquierda, incertidumbre, inestabilidad, son los términos que emplea el
presidente Mariano Rajoy y terminales mediáticas para infundir miedo al
empobrecido pueblo español. Se trata de evitar a toda costa que haya acuerdos/pactos
en los que el partido popular no esté. Ya vemos que no eran ocurrencias de
Esperanza Aguirre sino todo un plan para evitar los gobiernos de cambio que las
urnas del 24M exigen. Su nuevo mantra es que ellos son los que garantizan la
estabilidad, bien solos o acompañados de socialistas moderados. A la mano la
Arcadia feliz pero sin los radicales de Podemos, es su mensaje.
Rajoy asocia inestabilidad con gobiernos de coalición sabiendo que la prosperidad y estabilidad que disfrutan países de nuestro entorno está hecha a base de acuerdos y pactos de gobierno. Si repasamos la historia electoral de los últimos 70 años de Suecia, Dinamarca, Finlandia, Noruega e Islandia constataremos: que los gobiernos que se fueron conformando fueron mayoritariamente de coalición; que las mayorías absolutas alcanzadas en esos años fueron: una Suecia, y hace casi 50 años, ninguna en Dinamarca e Islandia y cuatro en Noruega, y la última hace más de 60 años; que las coaliciones sigue en la actualidad (por ejemplo en Suecia gobiernan los socialdemócratas en coalición con los verdes y en Dinamarca los socialdemócratas en coalición con el partido popular socialista y el partido izquierda radical, etc.); que en Islandia seguramente cuentan en el haber de estabilidad que su Parlamento iniciara acciones legales a finales de enero de 2009 contra el que fue su primer ministro, Geir Hilmar Haarde, por llevar a su país a la quiebra.
¿Cuánto tiempo lleva el Centro de Investigaciones Sociológicas certificando la inestabilidad creada por los sinvergüenzas y ladrones del erario público? ¿Cuándo veremos iniciativas semejantes a las de Islandia en los plenos de municipios, cabildos y asambleas autonómicas? ¿Cuándo en nuestro haber democrático estará la partida: autores de despilfarros y quiebras?
No se trata de frentes, ni ajustes de cuentas. Se trata de la estabilidad que nace del ejercicio de la democracia, la gran olvidada. Ellos hablan de ella como si de verdad les importara, cuando tenemos sobradas muestras de que se refieren a su estabilidad (por ejemplo, nos acordamos de José Antonio Monago pidiendo respeto para Podemos en julio 2014, y ahora negando la abstención a Fernández Vara para obligarle a pactar con Podemos). Tenemos que tejer alianzas con quienes verdaderamente vendrán con nosotros a buscar la estabilidad. En Badajoz, Cáceres, Valencia, Badalona, Madrid, Barcelona, Navarra, Castilla la Mancha, Extremadura…
Rajoy asocia inestabilidad con gobiernos de coalición sabiendo que la prosperidad y estabilidad que disfrutan países de nuestro entorno está hecha a base de acuerdos y pactos de gobierno. Si repasamos la historia electoral de los últimos 70 años de Suecia, Dinamarca, Finlandia, Noruega e Islandia constataremos: que los gobiernos que se fueron conformando fueron mayoritariamente de coalición; que las mayorías absolutas alcanzadas en esos años fueron: una Suecia, y hace casi 50 años, ninguna en Dinamarca e Islandia y cuatro en Noruega, y la última hace más de 60 años; que las coaliciones sigue en la actualidad (por ejemplo en Suecia gobiernan los socialdemócratas en coalición con los verdes y en Dinamarca los socialdemócratas en coalición con el partido popular socialista y el partido izquierda radical, etc.); que en Islandia seguramente cuentan en el haber de estabilidad que su Parlamento iniciara acciones legales a finales de enero de 2009 contra el que fue su primer ministro, Geir Hilmar Haarde, por llevar a su país a la quiebra.
¿Cuánto tiempo lleva el Centro de Investigaciones Sociológicas certificando la inestabilidad creada por los sinvergüenzas y ladrones del erario público? ¿Cuándo veremos iniciativas semejantes a las de Islandia en los plenos de municipios, cabildos y asambleas autonómicas? ¿Cuándo en nuestro haber democrático estará la partida: autores de despilfarros y quiebras?
No se trata de frentes, ni ajustes de cuentas. Se trata de la estabilidad que nace del ejercicio de la democracia, la gran olvidada. Ellos hablan de ella como si de verdad les importara, cuando tenemos sobradas muestras de que se refieren a su estabilidad (por ejemplo, nos acordamos de José Antonio Monago pidiendo respeto para Podemos en julio 2014, y ahora negando la abstención a Fernández Vara para obligarle a pactar con Podemos). Tenemos que tejer alianzas con quienes verdaderamente vendrán con nosotros a buscar la estabilidad. En Badajoz, Cáceres, Valencia, Badalona, Madrid, Barcelona, Navarra, Castilla la Mancha, Extremadura…
lunes, 1 de junio de 2015
Apuntes sobre elecciones municipales en Mérida y a ver qué
Extremadura Progresista
A mediados de marzo de 2015
conocimos una encuesta electoral sobre resultado de las elecciones
municipales en Mérida. Por entonces Sigma Dos pronosticó que el Partido
Popular perdería la mayoría absoluta, pasando de 13 a 10/11 concejales;
el Partido Socialista Obrero Español perdería un concejal, de 10 a 9;
Izquierda Unida y Socialistas Independientes Extremadura dejarían de
tener el concejal que cada organización había conseguido; Ciudadanos
obtendría uno y Mérida Puede cuatro concejales.
Dos meses después de aquella encuesta, las votaciones del pasado 24 de
mayo han configurado un tablero que nada tiene que ver con aquel sondeo.
El PP no ganó las elecciones y la pérdida de concejales ha sido más del
doble de lo previsto, de dos a cinco concejales menos; el PSOE mantiene
los mismos, 11; IU tiene dos, en lugar de desaparecer; Ciudadanos, dos
en lugar de uno previsto; Mérida Participa (Mérida Puede), dos en lugar
de los cuatro que le daba el sondeo.
Hay que destacar dos
circunstancias que probablemente han sido determinantes en el resultado
de dos organizaciones políticas. De una parte, el PSOE concurrió en
coalición con SIEX, y Mérida Puede tuvo que inscribirse con nuevo
nombre, Mérida Participa, para poder concurrir a las elecciones. Para el
PSOE ir junto a SIEX le ha supuesto mantener el mismo número de
concejales que en 2011, aunque haya perdido 352 votos con respecto a los
conseguidos por sendas organizaciones en 2011. Mientras que Mérida
Participa ha sufrido las consecuencias de tener que partir de cero, en
lo que a visibilidad se refiere, porque a escasos 20 días de las
votaciones el Registro de Partidos Políticos del Ministerio del Interior
denegó la inscripción de Mérida Puede.
En cuanto al partido
Ciudadanos, se ha visto beneficiada por la impronta que la marca tenía
en España. En cuanto a IU Mérida, subrayar que era la única de las
grandes ciudades (Badajoz, Cáceres) que no estaba enfrentada con la
dirección regional. El candidato emeritense junto al coordinador
regional en carteles y actos, mientras Manuel Sosa y Margarita Jubete ni
estaban ni se les esperaba. Los 260 votos más conseguidos que en 2011
le han permitido a IU Mérida doblar su representación municipal pero se
ha visto sobrepasada en votos por Mérida Participa (2.165).
Mérida
Participa no alcanzó las previsiones, que estaban situadas en, al
menos, los 3.434 votos que consiguió Podemos en las autonómicas de
Mérida , y que se corresponderían con los cuatro concejales que le
asignaban desde Sigma Dos. Seguramente, el cambio “obligado” de nombre
del partido (habría mucho que hablar sobre ello) y los escasos recursos
económicos para la campaña han sido elementos que han contrubuido al
aminoramiento de las expectativas.
En cuanto al PP, el candidato y
alcalde en funciones se ha responsabilizado de la debacle electoral
(5.405 votos menos que en 2011). Puede que el Centro de Investigaciones
Sociológicas, ubique en el incremento de abstencionistas (1.935 más que
en 2011), en Ciudadanos (2.282 votos) y Extremeños (967 votos) los
nichos de los votos emigrados del PP. Pronto lo sabremos.
Nuevo
tablero, tiempo de acuerdos, de ilusiones y esperanzas renovadas, es lo
que ha deparado la encuesta verdadera del pasado 24 de mayo. El lunes, 1
de junio, comienza una nueva etapa. El lunes comienzan propuestas sobre
la meas para rescates: democracia, ciudadanos, etc. Por sus hechos los
conoceremos, por sus hechos los calificaremos. De entrada, abstención,
hasta ver qué contenidos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)