"Más vale tarde que nunca, pero mucho tiempo, demasiado, faltando al respeto a las víctimas de la guerra de España de 1936 y de la Dictadura".
"El Caudillo se va de Guadiana”, era noticia este martes en este diario. Y lo era porque el Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura había aprobado "el cambio de denominación del municipio de Guadiana del Caudillo, que pasará a tener el nombre de Guadiana, y será efectivo una vez se anote en el Registro de entidades locales de la Administración del Estado y se publique en el Boletín Oficial del Estado, así como en el Diario Oficial de Extremadura".
Casi 69 años han pasado desde que el dictador inaugurara la primera fase de construcción de Guadiana del Caudillo (nombre que le pusieron como "modesta ofrenda a sus constantes entusiasmos en pro de la labor colonizadora").
Algo más de 41 años desde que la Constitución Española fue ratificada en referéndum por los españoles.
Ocho años desde que el Diario Oficial de Extremadura publicara el decreto 29/12, de 17 de febrero, firmado por José Antonio Monago Terraza, en calidad de presidente de la Junta de Extremadura, y cuyo artículo 1 recogía que “se aprueba la creación de un nuevo municipio con la denominación de Guadiana del Caudillo.
Un día después de celebración internacional del 75º aniversario de la liberación por el Ejército Rojo de todos los prisioneros del campo de exterminio de Auschwitz.
Y a -277 días para que por primera vez se celebre el “Día de Recuerdo para todas las Víctimas del Franquismo”, según recoge el documento “Un nuevo acuerdo para España” de la coalición progresista PSOE/Podemos (Madrid, a 30 de diciembre de 2019).
El día 1 de febrero de 2019, y en el acto de la proyección del documental “La causa contra Franco” en la Casa de la Cultura de Guadiana, el codirector del mismo, Dietmar Post, de 57 años y natural de Espelkamp, Alemania, pidió perdón públicamente, y en nombre del pueblo alemán, por aquel genocidio. Y el pasado lunes, y en el marco del 75º aniversario de la liberación, las víctimas del genocidio nazi y holocausto nos exigían que tengamos presente, en la memoria, aquel horror y que nos empeñemos en evitar que vuelva a pasar.
Enhorabuena a todos los que han contribuido para que el acuerdo del Consejo de Gobierno sea una realidad porque es cierto que más vale tarde que nunca, pero mucho tiempo, demasiado, faltando al respeto a las víctimas de la guerra de España de 1936 y de la Dictadura.
Qué falta de pedagogía escolar sobre el franquismo padecimos, denunciaba un joven de Guadiana, Marko, en aquel acto, ante un atónito Post. Es tarea colectiva que se corrija en toda su extensión y profundidad. Tanta desmemoria, tan poca reparación y demasiado tiempo de injusticia.
Además, alerta, siempre alerta, que siguen ahí los que quieren que vuelvan los principios de aquel apelativo y se alargue en el tiempo su negra sombra.