El Periódico Extremadura
Monago aplaudiendo la placa "del Caudillo" |
El expediente quedó abierto, de modo que el cambio de nombre, con la supresión “del Caudillo”, permitiría la reanudación del trámite en cualquier momento sin necesidad de repetir todo el papeleo desde el principio. No ha sido preciso cambiar el nombre porque el Consejo del llamado Gobierno de Extremadura celebrado este viernes ha aprobado la segregación sin necesidad de suprimir “del Caudillo”.
El editorial de este diario recogía aquel 22 de marzo: “En
la práctica, el alcalde pedáneo está poniendo excusas de todo tipo para
no cambiar el nombre (que si no le ha informado el Consejo de
Consultivo, ni la Diputación, que si hay que preguntar a los vecinos),
cuando como responsable político debería saber que hay una ley, la de la
Memoria Histórica, que está por encima de esos informes, y que
establece que los nuevos municipios ‐‐y Guadiana lo sería tras su independencia‐‐ no pueden llevar nombres del franquismo. Preocupa que Pozo no lo sepa. Preocupa más que el PP apoye esas demandas”.
Al final Monago ha tomado la indecente decisión política de permitir que un nuevo municipio de
Extremadura lleve nombre franquista. No hará falta que vengan de fuera a
manifestarnos sentir vergüenza y repudio ante tal indignidad y falta de
respeto a las víctimas del genocida, ya lo expresamos los que nacimos
allí.
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