El Periódico Extremadura: "Caballo de espuma"
La última comparecencia del presidente
Rajoy ante el Pleno de la Cámara nos trae al recuerdo la del
presidente Aznar de 18 de marzo de 2003 para informar sobre la
situación internacional en relación con Irak y la posición del Gobierno.
En aquella Aznar afirmó que "es una constatación unánime" que el
Consejo de Seguridad de la ONU ha tratado de obtener el desarme de los
arsenales iraquíes de armas de destrucción masiva pero que el régimen de
Saddam "creó en su momento un sistema organizado de ocultamiento y
de engaño que hace inútil la labor de los inspectores de Naciones
Unidas". Los pueblos de las tierras de España y de otros lares no
creyeron lo de las armas de destrucción masiva ni la patraña del engaño
del régimen iraquí. Lo que sí constataron fue la condena preventiva, la
guerra ilegal. Cuatro años después, febrero de 2007, Aznar reconoció su
equivocación: "No había armas. Ahora yo también lo sé. Tengo el problema
de no haber sido tan listo de saberlo antes".
En la comparecencia del pasado 1 de agosto y refiriéndose a Luis Bárcenas , extesorero del partido popular, Rajoy dijo: "¿Me engañó? Sí. Lo tenía muy fácil. Yo no condeno a nadie de manera preventiva". Y sobre las acusaciones de existencia de una cuenta B del PP dijo: "No me consta". Pero la inmensa mayoría de los ciudadanos no cree lo manifestado por Rajoy. Tienen la certeza de que no hubo engaño de Bárcenas sino que Rajoy lo sabía, y que le constaba la existencia de la cuenta B en el partido que preside. Sí están de acuerdo con la negación de Rajoy a la condena preventiva a cualquiera, y que ojalá la hubieran tenido cuando la guerra de Irak.
Las consecuencias ulteriores de aquella guerra aún está padeciéndolas el pueblo iraquí, y las mentiras del Gobierno sobre tal asunto se sustanciaron políticamente en las elecciones de 2004. Todo indica que lo mismo ocurrirá en las próximas elecciones europeas y generales, y con mayor calado si el PP no sustituye al presidente que remitió un SMS de apoyo a Bárcenas dos días después de conocerse la existencia de su cuenta millonaria en Suiza. Dicha sustitución no pondrá en juego la estabilidad de España sino que más bien podría paliar el pesimismo que sobre los políticos tienen los españoles. Por la puerta principal salió Adolfo Suárez ; por la falsa Richard Nixon ; la de Rajoy está por ver cuál será.
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| Rajoy en el Congreso, 1 de agosto de 2013 |
En la comparecencia del pasado 1 de agosto y refiriéndose a Luis Bárcenas , extesorero del partido popular, Rajoy dijo: "¿Me engañó? Sí. Lo tenía muy fácil. Yo no condeno a nadie de manera preventiva". Y sobre las acusaciones de existencia de una cuenta B del PP dijo: "No me consta". Pero la inmensa mayoría de los ciudadanos no cree lo manifestado por Rajoy. Tienen la certeza de que no hubo engaño de Bárcenas sino que Rajoy lo sabía, y que le constaba la existencia de la cuenta B en el partido que preside. Sí están de acuerdo con la negación de Rajoy a la condena preventiva a cualquiera, y que ojalá la hubieran tenido cuando la guerra de Irak.
Las consecuencias ulteriores de aquella guerra aún está padeciéndolas el pueblo iraquí, y las mentiras del Gobierno sobre tal asunto se sustanciaron políticamente en las elecciones de 2004. Todo indica que lo mismo ocurrirá en las próximas elecciones europeas y generales, y con mayor calado si el PP no sustituye al presidente que remitió un SMS de apoyo a Bárcenas dos días después de conocerse la existencia de su cuenta millonaria en Suiza. Dicha sustitución no pondrá en juego la estabilidad de España sino que más bien podría paliar el pesimismo que sobre los políticos tienen los españoles. Por la puerta principal salió Adolfo Suárez ; por la falsa Richard Nixon ; la de Rajoy está por ver cuál será.
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