El franquismo abolió por decreto de 12 de abril de 1937 dicha conmemoración en España. Un año después se publicó el Fuero del Trabajo que estableció que cada 18 de julio se celebraría la Fiesta de la Exaltación del Trabajo, y así unían tal fiesta con la fundacional de la dictadura. Para Franco el "Día del Trabajo" era un día de movimientos subversivos; para él su celebración tenía nexos marxistas y republicanos.
En 1955 el papa Pío XII introdujo en el calendario religioso el 1 de mayo como celebración de San José Obrero o Artesano. Los valores del nacionalcatolicismo del régimen franquista aceptaron esta festividad pero le traspasaron la organización y control a la Falange y la Iglesia. En esta festividad, todos los ciudadanos estaban obligados a participar y las manifestaciones, fiestas y proclamas se usaban para enaltecer el régimen fascista y para poner en valor los logros alcanzados en la sociedad desde la finalización de la guerra de España de 1936.
En 1978, 40 años después del Fuero del Trabajo, se volvió a celebrar el "Día del Trabajo" en conmemoración del movimiento obrero mundial: jornada para realizar diferentes reivindicaciones sociales y laborales a favor de las clases trabajadoras.
Pero en Guadiana del Caudillo es diferente desde hace años. El alcalde Antonio Pozo Pitel viene sustituyéndola por la "Fiesta del Caballo".
Carteles a color que convocan a la fiesta del “Día del Caballo 2019”, y que sustituye a la del 1º de mayo. Son carteles que recuerdan tanto aquellas celebraciones franquistas, grises, del 1º de mayo en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid.
Esperamos y deseamos que los vecinos de Guadiana del Caudillo pongan con sus votos fin a esta anomalía el 26M, y quede relegada a un pequeño paréntesis en la historia del pueblo.
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