lunes, 18 de agosto de 2008

Asumir, no pasar página.

Voz emérita
Han pasado 72 años, pero la memoria colectiva consigue que la vida continúe y siga por la senda que nunca fue abandonada ni arrebatada: la de la dignidad. Vanos fueron los intentos de quienes querían que la losa del olvido se impusiera, máxime para los que quisieron vencer y matar. El tiempo del silencio fue superado, el tiempo del duelo se ha abierto camino.

Los esfuerzos de tantos, bien sean de búsqueda de personas desaparecidas, de excavaciones arqueológicas de fosas comunes, bien sean de publicaciones sobre la base de la investigación histórica, se están traduciendo en los resultados esperados y se avanza inexorablemente hacia el objetivo propuesto: La Recuperación de la Memoria Histórica”.

Quienes por su condición y/o prácticas políticas y sociales fueron perseguidos, humillados, encarcelados o asesinados viven con la certeza de estar presentes en nuestras vidas, porque nuestras razones impiden el paso a los defensores del olvido.

domingo, 10 de agosto de 2008

Asumir, no pasar página.

Extremadura al día
Han pasado 72 años, pero la memoria colectiva consigue que la vida continúe, y que siga por la senda que nunca fue abandonada ni arrebatada: la de la dignidad. Vanos fueron los intentos de quienes querían que la losa del olvido se impusiera, máxime para los que quisieron vencer y matar. El tiempo del silencio fue superado, el duelo se ha abierto camino.

Los esfuerzos de tantos, bien sean de búsqueda de personas desaparecidas, de excavaciones arqueológicas de fosas comunes o de publicaciones de libros sobre la base de la investigación histórica, se están traduciendo en los resultados esperados, y se avanza inexorablemente hacia el objetivo propuesto:"La Recuperación de la Memoria Histórica".

Quienes por su condición y/o prácticas políticas y sociales fueron perseguidos, humillados, encarcelados o asesinados viven con la certeza de estar presentes en nuestras vidas, porque nuestras razones impiden el paso a los defensores del olvido.

lunes, 4 de agosto de 2008

Mérida es lo importante.

Voz emérita
Antonio Vélez Sánchez
La VOZ emérita de 28 julio de 2008 recogía el artículo "La irritante sordera sobre el tren en Mérida", en el que Antonio Vélez Sánchez manifestaba: “…el poder municipal se ha encastillado en una posición monolítica que, en la opinión de muchos, va a resultar errónea para el futuro de la ciudad… No se ha tomado en la menor consideración esa propuesta [refiriéndose a la suya], ni se ha intentado una aproximación para un debate positivo sobre el asunto. No sólo eso, sino que ni siquiera ha mediado una conversación o una llamada telefónica. Podrán imaginar que si la experiencia de quien ha sido alcalde de la ciudad no pinta nada, en este y otros asuntos, a pesar de pertenecer a la misma organización política que gobierna el Ayuntamiento, ya me dirán qué cuenta el resto de los ciudadanos”. También dice: “Rechazo cualquier tentación oscurantista, alicorta e impuesta, en éste y muchos temas, en la seguridad de que barajando opiniones se tienen muchas más garantías de acertar”.

El periódico Hoy del 27 de junio de 1994 recogía como titular: “Ángel Calle reprocha a Vélez el no haber recibido a la plataforma sanitaria”. La información señalaba que el portavoz municipal de IU, Ángel Calle, ha reprochado al alcalde Antonio Vélez el que no haya recibido, ni haya contestado a la plataforma ciudadana por la sanidad, que hace unas semanas le solicitó una entrevista para tratar sobre la ampliación y mejora del Hospital. También dijo: “Por otro lado Calle se refiere a la plataforma sanitaria que, en su opinión, es una de las iniciativas más interesantes para propiciar la participación ciudadana e impulsar la crítica organizada”.

Catorce años median entre sendas denuncias. Cuántos elementos comunes entre ambas: sordera institucional, déficit de participación ciudadana, interés para Mérida, etc.

Antonio, el Hospital se amplió y continúa su reforma; el ambulatorio Obispo Paulo pasó a convertirse en Centro de Salud; y tú, en compañía del doctor Iglesias (entonces concejal de sanidad) nos recibiste, tarde, pero nos recibiste. Fueron muchos los oídos de tu organización los que al final se dignaron en escucharnos, aunque fuéramos sólo “resto de ciudadanos”, y sabes que mereció la pena la lucha, porque Mérida ganó.

Te animo a continuar proponiendo en todo aquello que conoces bien, sin desfallecer, y con la mano tendida como lo vienes haciendo. Pues tengo la certeza que la tribuna pública siempre acaba imponiéndose sobre las opiniones. Eso sí, te sugiero que lo hagas como uno más de esta ciudad, sólo como uno más.