domingo, 10 de mayo de 2015

Ahora más política, empoderamiento ciudadano

Extremadura Progresista 
Pablo Iglesias y Ada Colau

Una forma de desprecio a lo identificado como “clase política” ha ido creciendo paulatinamente en el pueblo en la medida que sus condiciones socioeconómicas las empeoraban los hegemónicos. Paralelamente, también crecía la negativa a seguir el consejo del dictador Franco: “no se meta usted en política”.

Muestra de esas dos caras fueron los resultados en España de las elecciones al Parlamento Europeo de 2014. Algo nuevo empezaba a nacer con el objetivo de que lo viejo acabara de morir. Luego vinieron las elecciones en Andalucía para confirmar el principio del fin del modelo bipartidista.

Ahora el partido de José Antonio Monago se agarra a un supuesto cariño del pueblo ante los resultados adversos que predice la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas en la región. Curiosamente, Monago hizo lo mismo el pasado mes de marzo cuando un sondeo de Sigma Dos recogía que los extremeños lo preferían para presidir la Junta. “Noto el cariño de los extremeños y es lo que me da fuerzas para seguir trabajando día tras día", dijo por entonces.

Sabemos del poder que acumula su gobierno para escribir y repetir de forma cansina su figurado relato. Pero han sido tantas las evidencias del auténtico relato, tanto reciente: denuncias a interlocutores sociales, a policías, a desahuciadas, a la Delegación del Gobierno, insultos a adversarios, etc., como anterior: cierres de centros de salud, copago farmacéutico, tasa del agua, etc., que se hace imparable el cambio. Además, como el affaire “viajes a Canarias”, “2 Sures”, la supuesta apropiación del logo campaña “Hacemos Extremadura” y la retirada de la música tradicional del PP en sus actos políticos roza el esperpento, está contribuyendo al reforzamiento del empoderamiento ciudadano.

También será fruto del empoderamiento la nula representación que obtendrán los que dieron el cambiazo en 2011. Será la resultante de la constatada inútil fuerza política (tres diputados) que desarrollaron durante cuatro años para quienes debían defender.

Por el contrario, se muestra con esperanza e ilusión lo que acaba de nacer. Más política vendrá con su representación institucional si no abandona su papel en la calle. En ella están los combativos campamentos dando muestra evidente del empoderamiento ciudadano, de la política.

sábado, 9 de mayo de 2015

Ahora más política, empoderamiento ciudadano

Nosolomérida
Manuel Cañada con miembros del Campamento Dignidad
Una forma de desprecio a lo identificado como “clase política” ha ido creciendo paulatinamente en el pueblo en la medida que sus condiciones socioeconómicas las empeoraban los hegemónicos. Paralelamente, también crecía la negativa a seguir el consejo del dictador Franco: “no se meta usted en política”.

Muestra de esas dos caras fueron los resultados en España de las elecciones al Parlamento Europeo de 2014. Algo nuevo empezaba a nacer con el objetivo de que lo viejo acabara de morir. Luego vinieron las elecciones en Andalucía para confirmar el principio del fin del modelo bipartidista.

Ahora el partido de José Antonio Monago se agarra a un supuesto cariño del pueblo ante los resultados adversos que predice la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas en la región. Curiosamente, Monago hizo lo mismo el pasado mes de marzo cuando un sondeo de Sigma Dos recogía que los extremeños lo preferían para presidir la Junta. “Noto el cariño de los extremeños y es lo que me da fuerzas para seguir trabajando día tras día", dijo por entonces.

Sabemos del poder que acumula su gobierno para escribir y repetir de forma cansina su figurado relato. Pero han sido tantas las evidencias del auténtico relato, tanto reciente: denuncias a interlocutores sociales, a policías, a desahuciadas, a la Delegación del Gobierno, insultos a adversarios, etc., como anterior: cierres de centros de salud, copago farmacéutico, tasa del agua, etc., que se hace imparable el cambio. Además, como el affaire “viajes a Canarias”, “2 Sures”, la supuesta apropiación del logo campaña “Hacemos Extremadura” y la retirada de la música tradicional del PP en sus actos políticos roza el esperpento, está contribuyendo al reforzamiento del empoderamiento ciudadano.

También será fruto del empoderamiento la nula representación que obtendrán los que dieron el cambiazo en 2011. Será la resultante de la constatada inútil fuerza política (tres diputados) que desarrollaron durante cuatro años para quienes debían defender.

Por el contrario, se muestra con esperanza e ilusión lo que acaba de nacer. Más política vendrá con su representación institucional si no abandona su papel en la calle. En ella están los combativos campamentos dando muestra evidente del empoderamiento ciudadano, de la política.


lunes, 4 de mayo de 2015

Monago, experto en tomateras

Nosolomérida
Cañete y Monago plantando tomateras

“¿Sabe lo que es una tomatera y como crecen las tomateras?, le espetó José Antonio Monago al diputado socialista Miguel Bernal en el pleno de la Asamblea de Extremadura celebrado el 7 de mayo de 2014. Luego le contó que tenía tres o cuatro tomateras en una maceta que ya llevaban 15 o 20 días “sembradas”; que las tomateras tienen un tronco principal y le salen ramas auxiliares, ramitas al medio, que son “los chupones”, que es lo que hay que quitar.

“¿Sabe lo que son los chupones y por qué se quitan?”, también le preguntó a Bernal. Después contó que no todas las plantas tienen chupones pero las tomateras sí; que se quitan los chupones porque si no la planta se desarrolla mucho a nivel de hoja y no da buenos frutos.

Y concluyó de la forma: “No busque, señor Bernal, Internet lo de los chupones porque es verdad, se lo digo yo, que yo sé de campo”.

Un año después Monago en el marco de un desayuno informativo en Madrid hace similar pregunta a los dirigentes de Podemos:” ¿Saben lo que es una tomatera? ¿La han visto?”.

No sabemos si desde Podemos contestarán a las preguntas de Monago, pero seguro que no confundirán sembrar con plantar tomateras, ni referirán los inexistentes chupones en las tomateras. Eso queda para quien dice saber de campo.

Por entonces, 7 de mayo de 2014, Fernández Vara anunció moción de censura a Monago, y por ahora estamos a escasos días de las elecciones. Tanto entonces como ahora, cabe aquello de ¡vaya la tomatera que tiene encima!.

Monago, experto en tomateras

Extremadura Progresista
Cañete y Monago plantando tomateras
“¿Sabe lo que es una tomatera y como crecen las tomateras?, le espetó José Antonio Monago al diputado socialista Miguel Bernal en el pleno de la Asamblea de Extremadura celebrado el 7 de mayo de 2014. Luego le contó que tenía tres o cuatro tomateras en una maceta que ya llevaban 15 o 20 días “sembradas”; que las tomateras tienen un tronco principal y le salen ramas auxiliares, ramitas al medio, que son “los chupones”, que es lo que hay que quitar.

“¿Sabe lo que son los chupones y por qué se quitan?”, también le preguntó a Bernal. Después contó que no todas las plantas tienen chupones pero las tomateras sí; que se quitan los chupones porque si no la planta se desarrolla mucho a nivel de hoja y no da buenos frutos.

Y concluyó de la forma: “No busque, señor Bernal, Internet lo de los chupones porque es verdad, se lo digo yo, que yo sé de campo”.

Un año después Monago en el marco de un desayuno informativo en Madrid hace similar pregunta a los dirigentes de Podemos:” ¿Saben lo que es una tomatera? ¿La han visto?”.

No sabemos si desde Podemos contestarán a las preguntas de Monago, pero seguro que no confundirán sembrar con plantar tomateras, ni referirán los inexistentes chupones en las tomateras. Eso queda para quien dice saber de campo.

Por entonces, 7 de mayo de 2014, Fernández Vara anunció moción de censura a Monago, y por ahora estamos a escasos días de las elecciones. Tanto entonces como ahora, cabe aquello de ¡vaya la tomatera que tiene encima!


sábado, 2 de mayo de 2015

Tableros y jaques políticos

Nosolomérida
Monago, Vara y Escobar
Se nota en el ambiente, hay ganas; muchas ganas. De una parte, ganas de conocer componentes de los diferentes tableros representativos: municipales y autonómicos. De otra, ganas de verificar los nacimientos y defunciones de actores políticos.

Muchos tableros municipales de Extremadura van a tener similar composición: blancas y negras. Esos colores estarán en casi todos los tableros municipales. En otros tantos, verán fichas multicolores sobre ellos (Badajoz, Cáceres, Mérida, Plasencia).

Algunos afrontan la partida planteando a la ciudadanía: el caos o yo. Son los del hormigón armado. Los caminos, puentes, túneles, etc. de Extremadura construidos por los extremeños con dicho material, que dice solo suministra él y los suyos. Así lo anuncia por doquier, bien con paguitas 300, bien con guarderías para funcionarios o con transporte gratuito para escolares, etc. También con soflamas: ¡¡¡Qué vienen bloques de izquierdistas!!!. Miedo que no falte, mucho miedo que diría Sabina, para resultar redondo como quiere y planifica Iván.

También muchos tienen ganas de participar en el tablero institucional, de la calle al pleno. Participan con el objetivo de ser decisivos. Nacen para crecer ahí, sin descuidar su presencia en la calle. Son los que ven necesario que lo viejo tiene que morir. Quieren recibir apoyo, votos, para dar jaque político a los responsables de la estafa. También para dar jaque político a sus cómplices. Sí, a esos que en la corta historia democrática extremeña hicieron tanto daño en tan solo cuatro años.

Tiempos nuevos, tiempos ilusionantes. Tableros nuevos de jaques certeros.